Curiosidades de la Lactancia
Por -
octubre 13, 2015
0
La lactancia materna no tiene por qué ser difícil. Si se hace de la forma adecuada no genera molestias en la madre y proporciona al bebé todos los nutrientes que necesitará para crecer sano. Para iniciar la lactancia con éxito sigue estos consejos:
Infórmate bien mientras estés embarazada
Acude a un grupo de lactancia y asesórate bien para conocer todos los detalles sobre la lactancia antes de que tu bebé nazca. Conocer la experiencia de otras madres y asistir a talleres en los que se explique cuáles son las posturas y las técnicas para dar el pecho será muy útil una vez que tengas que hacerlo tú.
Contar con la asesoría adecuada te ayudará también a estar más relajada y a que los primeros días de la lactancia, que en muchos casos son los más difíciles, discurran con normalidad y sin contratiempos que te creen molestias o dificultades serias.
Aprovecha el instinto de tu bebé
Iniciar la lactancia en la primera hora tras el parto no solo favorece la recuperación de la madre y del niño, sino que se aprovecha el instinto del recién nacido para que adquiera de forma natural la técnica correcta para amamantar.
El olfato del bebé está muy desarrollado y percibe el olor de la madre y del calostro. Si en el momento del nacimiento se coloca al recién nacido en el pecho de su madre piel con piel, este buscará de forma instintiva el pecho de su madre para alimentarse. Los bebés que inician la lactancia de esta forma tienen más facilidad para mamar de la forma correcta, lo que es beneficioso para madre e hijo.
Aprende a colocar y separar bien al lactante
Conocer la técnica adecuada para dar el pecho es muy importante. La mayoría de las dificultades que se presentan durante la lactancia son consecuencia de una mala técnica y de una mala sujeción del bebé, que puede ocasionar lesiones como grietas e irritaciones y también problemas como la mastitis porque el bebé no succiona suficiente cantidad de leche, provocando la congestión del pecho.
Por eso es fundamental trabajar para que el bebé aprenda cuanto antes cómo mamar correctamente. La boca del bebé debe abarcar todo el pezón y la areola debe quedar centrada para que la succión sea uniforme. Si la nariz del bebé está separada más de un centímetro del pecho de la madre lo más seguro es que el bebé no esté bien colocado.
Para separar al babé del pecho una vez ha terminado evita separarlo directamente, pues el vacío que genera al succionar puede lastimar la delicada piel de tu pezón. Cuando vayas a separar al niño introduce tu dedo meñique en la comisura de sus labios para que entre aire y el bebé se separe sin hacer presión.
Mantente bien hidratada
Esto es muy importante porque la composición de la leche materna es en un 88% agua. Consume alimentos ricos en líquidos y bebe al menos dos litros de agua al día para asegurarte de que cubres tus necesidades de hidratación mientras das el pecho.